Llegan esas fechas que eran tan deseadas en nuestra infancia y que ahora se convierten en algo tan complejo como padres y madres. Yo soy de esas personas que no entienden estos largos períodos vacacionales y que por otro lado renuncio a hipotecar la vida de los abuelos durante un período en el que deben disfrutar y tomar el sol tranquilos. Soluciones pocas pero al menos yo intento ser muy selectivo para poder equilibrar diversión, deporte y aprendizaje ya que no se puede estar dos meses y medio sólo de «happy summer». Vamos lo que es el «men sana in corpore sano» de toda la vida. Campus deportivo, campamentos en el monte, cursos, idiomas, cursillos y cursilletes; difícil oferta para que nuestros retoños no se aburran y podamos tenerles horas ocupadas mientras estamos en el tajo. Entre toda la oferta analizada me gustaría destacar la que tengo como experiencia positiva que cumple con una mezcla explosiva que aporte el men sana in corpore sano objetivo.

Hace mucho tiempo escribía algo así: por favor no quiero que mis pekes razonen con el pensamiento jerárquico carpeta-subcarpeta, a ver si consiguen aprender a etiquetar. La tecnología, la informática sigue siendo una asignatura en lugar de estar presente en todas las demás y aquí creo que la formación que nos aportan los planes escolares están cojos, muy cojos. Estamos en el año 2014 y no me conformo con que los niños y niñas aprendan a etiquetar y ahora me gusta mirar con envidia las tendencias internacionales que nos hablan del «Learn to Code». Sí, aprender desde la infancia a programar para experimentar con otra forma de razonar que les abra la puerta a un sorprendente desarrollo intelectual. Como la formación reglada no aporta nada en este modelo tenemos que buscarlo fuera y aquí hay un gran equipo de personas que están haciendo muy bien las cosas para solucionar el problema del tiempo vacacional de nuestros hijos e hijas aportando una oferta que mezcle diversión, deporte y las nuevas formas de aprendizaje alrededor de la Tecnología.

Esto es lo que nos ofrece el equipo que forman el Camp Tecnológico y su oferta de cursos de verano. Como os comentaba esto no es publicidad gratuita sino merecida ya que os hablo desde la experiencia que tuve el año pasado con mi hijo mayor con el que repetimos este año al que también se apunta ahora mi hija de 8 años. La verdad es que es un esfuerzo económico importante pero que merece la pena.

Por un lado aprendizaje de Electrónica, Programación, Robótica, Animación 3D y por otro Surf, Fútbol, Multideporte o Forestal Park. Y todo alrededor de productos tan interesantes como Arduino, LEGO Mindstorm, MineCraft, Scratch… Una o dos semanas de inmersión total en una experiencia que seguro nunca van a olvidar y que les permite seguir practicando y aprendiendo después desde casa. Una oportunidad para coger el tren del futuro que desgraciadamente no tiene muchas paradas por nuestro entorno.

 

 

Este año viene con novedades entre las que me gustaría destacar el Campus Girls@Tech – Chicas en tecnología en el que tengo interés personal. Se trata de un campus especialmente dedicado a fomentar el gusto por la tecnología para que nuestras hijas sean también las que lideren el cambio tecnológico del futuro cosa que todos sabemos que no está ocurriendo en la actualidad. En lugar de crear los robots y organizar combates como hace los chicos en esta parte intentan ser más creativos, más orientados hacia la imaginación buscando cuadrar en los rasgos que nos hacen ser diferentes en un entorno de igualdad. Aquí tenéis información sobre Girls@Tech.

Y por supuesto os dejo el enlace de toda la oferta de cursos de verano que tienen en marcha para este año. Campus de verano.

Si os animáis por allí nos vemos en la hora de llegada o recogida ;o)